miércoles, 17 de noviembre de 2010

Capítulo Ocho

Hoy mi madre ha hecho paella porque sabe que me gusta mucho, pero le he dicho que no me haga más, porque me cansa. Ella se ha quedado extrañada, porque la paella le sale igual de buena, yo sigo siendo Javi su hijo, sin embargo no me apetece paella.

El mayor ejemplo de como cada uno de nosotros interferimos en la realidad que observamos es el tiempo. El tiempo no existe.

Solemos oir que entre los 35 y los 65 la vida pasa muy deprisa, que los críos crecen rápido, que ya estamos otra vez en Navidad, que parece que fue ayer cuando hizo la comunión.... Y es precisamente por lo explicado antes, porque todo depende del sujeto, porque todo es y se nos presenta como lo vemos nosotros.

Por eso la vida nos pasa tan deprisa, porque a esas edades por lo general se repiten cada día nuestras vidas. Llevas a tu hijo al colegio, te vas a trabajar, te vas al gimnasio, acompañas al niño al futbol y en unas semanas te vas al mismo hotel de cada año en família porque te gusta mucho.

El tiempo así pasa más deprisa, porque no descubrimos nada nuevo, no tenemos la sensación de pasar etapas, sino de vivir en una sola etapa que nos acompañará hasta el resto de nuestros días.

Sé que algunos me han dicho alguna vez que ya están bien así, pero claro, los relojes parados también aciertan la hora dos veces al día! Y el que mata a dos personas es mucho mejor persona que cuando mataba a cuatro! Pero se puede ser más feliz, se puede exprimir más esto de la vida.

Sin embargo de pequeños, tenemos la sensación de que el tiempo pasa más despacio, la sensación de que vivimos más cosas, de que estamos alimentándonos de lo que nos da la vida porque estamos contínuamente descubriendo cosas nuevas! Profesores, los amigos, el deporte, salir de marcha, el sexo, la carrera, el trabajo. Recordamos la vida por etapas, como si hubiéramos hecho muchas cosas, tenemos la sensación de haber vivido mucho!

Y luego lo peor de todo es cuando alguien de 40 años (no os sintais atacados porque generalizo) te dice: "aprovecha ahora que puedes.." Pero vamos a ver! Esto es de locos, en qué parte del contrato de la vida pone que en un momento dado entregas tu vida? Y si lo pone, quien lo ha firmado? quienes son los contratantes?

Por favor que no os engañen. Hay que saltar, vivir, sonreir, hay que levantarse con nuevas ilusiones cada día, hay que andar (cuida tu cuerpo, vives en él), hay que llorar, hay que salir, hay que elegir, hay que emocionarse, hay que decir "te quiero", hay que decir "ya no te quiero", haz cosas que temas, disfruta! Porque el tiempo......

....el tiempo no existe!

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Es muy fuerte lo tuyo, ENHORABUENA!

Rak dijo...

Y tienes razón, pero también te digo otra cosa, llevo 20 años yendo al puta Perro Lechero y 20 años que pido 2 perros y una de papas... y 20 años más que los seguiré pidiendo.

julio dijo...

Señor cada dia me sorprendes mas, es cierto lo que dices, el tiempo aparentemente pasa deprisa, porque quizas asumimos nuestras rutinas diarias, sin hacer nada por cambiar,nos conformamos con eso.Y cuando de repente pasa algo que consideramos excepcional en nuestra vida,lo guardamos en el recuerdo, como si jamas pudiera volver a aparacer en nuestra vida,ese instante, esas sensaciones que tuvimos en ese momento..cuando realmente cada dia de nuestra vida deberiamos buscar esos instantes esos momentos.
Don javier siga escribiendo

marijose dijo...

Me encanta lo que dices y como lo dices!!!
Sige escribiendo petardillo, por que para mi ,esta es la parte de tu diamante mas pulida y la que mas enamora.

Ara dijo...

Hola Javi, soy Ara:
Totalmente de acuerdo, el tiempo no existe. De hecho, el reloj lo inventó el ser humano, las horas, los días, todo relacionado con La Tierra, pero no deja de ser una creación humana que no niego que nos ayude a orientarnos, pero por otro lado nos incita a estresarnos: 06.30, suena el despertador, corre a la ducha, vestirse, desayuno, curro, todo eso en una hora o menos. En esos 60 minutos, ¿cuántas veces hemos mirado el reloj? ¿ cuántas veces hemos sentido que no nos da tiempo, que tenemos algo que nos empuja a correr y hace que lleguemos al trabajo en tensión? ¿cómo que no nos da tiempo, si el tiempo no existe?. A veces me pregunto, qué pasaría si retrocediera mi minutero 120 minutos, podría vivir con dos horas de retraso con respecto al resto de españoles, y no por eso viviría en el pasado o en otra dimensión diferente.

Anónimo dijo...

m'encanta :)

kati.

Anónimo dijo...

impresionante....me encanta¡¡¡